martes, junio 15, 2010

XII. Desconcierto ameno.

Distinguí una a una las voces que alcanzaba a percibir. Eran Carlisle, Alice y mis padres. Éstos últimos se notaban precupados y como era de esperarse, exageradamente.
Después de una larga plática acerca de mí todos se marcharon. Nunca me gustó oir acerca de mí, mucho menos cosas tristes, pero hoy la ocasi+on lo ameritaba.
Abrí los ojos y sólo quedaba Carlisle. Me miró atónito por un segundo y me mostró una gentil sonrisa. Lo hacía para que no sospechara, quizá tenía algo de gravedad... pero sin duda, ese adorno en la cara me calmaba. Tocó mi frente, su mano era igual de fria que un hielo o tal vez más, pero también, yo por lo menos era más cálida.
-Ya estás mejor.
-¿Qué me sucedió?-pregunté totalmente desconcertada. Solo recordaba que me había quedado platicando con mi padre y después... nada, absolutamente nada.
-Tuviste un desmayo a causa de la impresión, pero no te preocupes para nada. Sólo quedate en la cama reposando.
-Gracias.
Odiaba reposar, era una chica muy inquieta, no podía estar quieta solo reposando. Carlisle lo sabía y me advirtió que no lo hiciera.
-Será mejor que evites estar vagando por los alrededores. No hay razón para preocuparse Nessie.
Sí había razón. No exactamente yo con mis repentinos desmayos... era peor, mucho peor. Claro es como cuando dicen en los medios de comunicación de los desastres, pero no pasa nada. Hace tanto tiempo que "no pasa nada" y sigue pasando delante de nuestros ojos. Que tontería...
-Volveré más tarde.
Carlisle se dio la vuelta y antes de que pudiera tocar la puerta lo llamé. Algo me incomodaba.
-¡Abuelo!-Me miró enseguida preocupado.-¿No... no ha llamado nadie?
Parecía saber a qué me refería, soltó una risita antes de contestar.
-Sí te refieres a Jake, no, aún no ha llamado.
-¡No! Yo no... no lo decía por él sino que...
-Aunque lo intentes no sé puede ocultar, es inevitable.
¿De verdad se notaba tanto? Quizá es cierto, algunas cosas no se pueden ocultar y encabeza la lista los sentimientos. Sobre todo éste que me estaba atormentando día y noche.
-¡Calmate Bella, lo arreglaremos todo!
-¡¿Qué piensas hacer?!
Escuché gritos en la habitación anexa; eras mis padres. Como era de suponerse mi madre estaba no molesta, sino furiosa.
-¡No permitiré que le hagan daño a mi hija por ningún motivo!
-No seas absurda ¿Crees que yo dejaría que suceda algo?
-¡No soy absurda, soy realista! Me preocupa Nessie...
Hubo un silencio por unos minutos. Odiaba ser la causante de todo esto, yo no pedí estar así, no pedí ser así, no pedí enamorarme, no pedí ... pero si hubiera podido pedir algo, sería tener una eternidad pacifica.
Mi curiosidad fue mucho mayor que el respeto a su privacidad, me acerqué a la puerta entreabierta... ahí estaba la imagen que me destrozó en un parpadeo, me dejó indefensa y atonada el verla llorando por mi causa.
-Encontraremos juntos una solución. ¿Te parece si vamos a verla?
Corrí a la recámara de nuevo y me acosté antes de que sospecharan que los había oído.
Entraron juntos. Ahí estabamos los tres en una misma habitación, tratando de ser fuertes en el interior para nos derrumbarnos en nosotros mismos.
-¿Cómo sigues?- Preguntó mi madre, tratando de ponerme una sonrisa al igual que Carlisle pero a ella solo le salió una mueca.
-Mucho mejor- Mentí.- Siento haberles causado un gran susto.
-Disculpen.- Mi padre salió, dejandonos solas.
-Eres aún muy pequeña, aunque no lo creas. Necesitas protección.
Ahí estaba otra vez la madre sobreprotectora que me desquiciaba tanto; pero por primera vez la comprendí.
-Ya no soy tan pequeña, entiende que he crecido y se cuidarme bien, aunque eso no quite que soy alguien torpe y tal vez me ocasione daños, no siempre voy a poder contra todo. Comprendeme.
-¿Recuerdas?- dijo tomando el relicario que habia tenido conmigo durante tanto tiempo, era parte de mí, como un organo más. -Más que a mi propia vida...
Era el mejor momento con ella. Era también como una promesa, ella cuidaba de mí y yo le correspondería cuidando de ella.
-Te quiero.- Le dije con las palabras llenas de bienestar por tenerla a mi lado.
-Yo a tí.- Ésta vez no hizo una mueca, fue la mejor sonrisa que vi adornar su rostro.

Mi padre volvió llamandonos, estaba apurado.
-Nessie tiene visita, Bella, será mejor que bajes ahora.- Noté que estaba molesto, aunque no por la misma razón por la que lo había estado antes. Era distinto.
-Sí deseas algo avisame... estaremos cerca.
Los dos salieron tomados de la mano, cerraron la puerta. Quedé sola, cerre los ojos de cansancio.
¿Quién me visitaría? Bueno, no tenia tantos amigos como para que alguien viniera, pero...
Abrieron la puerta suavemente, con suma delicadeza.
-Nessie- murmuró aquella voz inconfundible para mí. Abrí los ojos intantaneamente.
-¡¡¡Jake!!!

6 comentarios:

  1. la historia esta espectacular...sigan publicando...muy emocionante...,

    ResponderEliminar
  2. cuando sigues publicando por favor no te demores!!!!!!

    ResponderEliminar
  3. nena tu historia me dejo muy atrapada pero tengo la duda
    es del libro real o de tu propia autoria
    respondeme a mi blog pliss

    ResponderEliminar
  4. ¿NO HAS VUELTO A PUBLICAR MAS CAPÍTULOS DEL 12?, SI HAY MÁS NO LOS ENCUENTRO DE LUZ DE LUNA.
    UN LAMETÓN

    ResponderEliminar
  5. no seguiras publicando???

    ResponderEliminar